El refugio

“Piedra, madera y calor de hogar”

El refugio Gral San Martín, más conocido como Refugio Jakob debido al lago que está a sus pies, está ubicado a 1600 metros sobre el nivel del mar. Fue construido a base de piedra y madera, a principios de los años cincuenta, y ampliado en sucesivas ocasiones. Actualmente la nueva edificación, tiene una capacidad para albergar cómodamente hasta 60 personas aproximadamente, cuenta con distintas habitaciones con vistas al lago y a los cerros cercanos, un gran salón- comedor con grandes ventanales orientados al Sur y Oeste amaneciendo con las cumbres resplandecientes y atardeciendo con el sol de frente ocultándose  en los cerros. El refugio ofrece un servicio de abundantes comidas caseras, cenas, desayunos y meriendas completas. Trabajamos enfocándonos en un cálido recibimiento luego de tanto esfuerzo y en un hospedaje cómodo y placentero de la mejor manera posible en medio de la montaña.

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Un poco de historia...

El refugio San Martín original fue creado en el año 1952 por el Club Andino Bariloche (era el centenario de la muerte de el Gral San Martín). El lago Jakob es renombrado por Otto Meiling en 1936, en honor a Christofredo Jakob, un reconocido neurólogo y apasionado andinista traído para dar la cátedra de neurología en la Universidad de La Plata. Él era nacido en Alemania, y le gustaba ir a Bariloche a caminar por la montaña. Paraba normalmente en el Hotel Tronador, y le gustaba subir por el valle del Casalata hasta el lago Jakob. Él iba y se sentaba ahí. Tenía un guía, que se llamaba Cretón, que lo acompañaba en sus recorridas por la zona.

El Refugio pasó por diversas ampliaciones a lo largo de los años, a base de mucho trabajo y dedicación, los materiales fueron subidos “a hombro” y también con caballos, El refugio contaba ya con dos habitaciones grandes comunes, el salón/ comedor, cocina externa y cocina interna dando servicio constantemente durante todas las primaveras, veranos y otoños, cuando el refugio sufrió un incendio intencional durante el invierno del 2017 mientras éste estaba cerrado por las grandes nevadas. Fué destruido totalmente, sólo se pudo salvar un pedazo de la platea original, todo el resto ardió. Fue un hecho muy doloroso, muchísimos años de trabajo y de crear un hogar para muchas familias, El concesionario actual  Claudio Fidani comenzó como refugiero en los años ’70 y después de 45 años, sigue poniendo su trabajo al servicio del refugio, actualmente junto con su hijo Nicolás Fidani.

Refugio viejo
Refugio viejo

Gracias a el Club Andino, Provincia de Río Negro, Parques Nacionales y muchas personas que amaban el refugio fue posible su rápida reconstrucción. “Trabajamos desde el dolor para recuperar algo que es muy valioso para todos. El refugio representa el esfuerzo de mucha gente que se comprometió” C.F. Tras 120 viajes de helicóptero, cientos de horas de trabajo manual de muchas personas y el deseo de verlo abrir sus puertas nuevamente; El refugio se reinauguró el 21 de abril de 2018 celebrando con todos los amigos y visitantes que lo hicieron posible. Desde entonces, el refugio está abierto todo el año, brindando servicio y calidez a quienes lo visitan.

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